Generar cambios de fondo en el sistema educativo, si bien tiene que ser prioridad para esta administración, invariablemente nos lleva a la pregunta: ¿Cuánto va a permitir cambios Elba Esther?
Ahorita que está abierta la encuesta sobre los diferentes temas a abordar en el Plan Nacional de Desarrollo, y al fin que las chaquetas mentales no cuestan nada, se me ocurre que estamos a tiempo de que la educación sea el gran logro de este sexenio.
Y habría que fijar objetivos claros: Maestros realmente capacitados (para enseñar, no para apoyar a la APPO), incentivar la creación de nuevas generaciones de maestros que lo hagan porque tienen la vocación y se puede vivir de ello y no por las razones tradicionales, crear programas que apoyen a jubilados, recién egresados y profesionistas que enseñen medio tiempo o unas horas.
Lo importante es el resultado final, y decir: "Estamos alfabetizando al 100% de la población" no es suficiente, ahí esta el caso gringo, todos tienen acceso a la educación y mas o menos la van librando hasta el equivalente a preparatoria, pero haces una encuesta en la calle y son los cabrones más incultos que han caminado sobre la tierra. Ejemplos: No poder ubicar a México o Australia en un mapa, no saber quién fue Hitler.
Se pueden hacer fuertes avances en la educación, la clave es querer que las próximas generaciones estén mejor preparadas (y eso nos lleva a la generación de otro tipo de empleos). Si se necesita el apoyo o no de Elba Esther es otro boleto, todo cambio tiene sus costos políticos, el chiste es que haya quien quiera pagarlo.
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